lunes, 24 de agosto de 2015

Un Secreto

Tengo un secreto


Lo bueno de los secretos es que se esconden por los rincones, 
viajan en los trenes por la mañana, se devuelven a su lugar una vez escudriñados por lo menos dos veces al día. 

Los secretos se dibujan en blanco y negro


Se distinguen en algunas miradas que no en todas y vuelan por las azoteas de las ciudades y los pueblos a cazar incautos parlanchines que morirán de tristeza.

Los secretos pican en las nalgas y adormecen palabras bellas y dolorosas, nada más venenoso que un secreto tras una cena con un buen vino.

Se guardan en cajas vario pintas en forma de órganos, por lo general. En ocasiones se guardan en vísceras y gritan.

 
Guardar un secreto de amor es una muerte lenta.
Guardar un secreto a un amigo es lícito cuando la única tela que odias es la de juicio.

Yo
Tengo un secreto y tengo dos
uno me duele y el otro no :)

La naturaleza esconde su secreto porque es sublime, no por astucia
(que dijo Einstein)


Bona nit

P.D


Hay que empezar a correr tras el verano que se escapa

Love & Hats




2 comentarios:

Anónimo dijo...

En Fiji no existen los secretos. Solo historias contadas a la sombra de una palmera y todo el tiempo del mundo para ser oídas.
El resto es tabu.
Las fiestas, si tienen Gracia, abarcan sorpresas. Aunque solo sean contadas.
Grumete

anna blau dijo...

ay grumete! y digo yo... quien me mira desde Fiji? Ganas de que me cuentes tus aventuras.. ahora que estás libre de secretos y lleno de sombras de palmeras. Mil besos